El Abismo del Horizonte afectado por el Rift
En Fatal Frame III, el rift (grieta) era la fuerza infernal que debe ser subyugado por la realización de un ritual. En el juego, el rift se consideraba una brecha tanto física como metafísica entre el mundo de los vivos y los muertos. La brecha física se encontraba en las profundidades del Santuario Kuze, y es el cuerpo del agua que separa el Abismo del Horizonte del resto del Último Pasaje, donde cruzan los espíritus al otro lado. También existe la metafísica del rift en esta zona estaba contenía la Cámara del Trono. Al igual que el distanciamiento físico, de estos sueños, que surge del amor a los muertos. Cuando una persona sueña con frecuencia en sus seres queridos perdidos y en el dolor de la pérdida, sus sueños se vuelven una puerta al otro mundo. Por lo tanto, las personas que vienen a ofrecer su dolor a la Sacerdotisa Tatuada, la hacían que pudiese dormir para siempre y así mantener el rift dentro de sus sueños.
Sin embargo, cuando Reika Kuze abre sus ojos mientras estaban tatuados, el dolor del Tatuaje de Acebo se refleja en todo el mundo. Aquellas personas que fueron afectadas por el rift físico sentían un gran dolor y se propagaba lentamente. También se cubrían de tatuajes como es el caso de Yashuu Kuze y los Grabadores.
Al igual que los juegos anteriores, en los portales al inframundo, el rift se mantenía en expansión y se debía contener ofreciendo sacrificios humanos. La única manera de cerrar la brecha era enviar a la Sacerdotisa Tatuada en una barca hacia el otro mundo. La sacerdotisa debe soportar el dolor de los sobrevivientes por el fin de los tiempos. Sin embargo, el rift se expandió mas allá del último pasaje en el santuario Kuze, evitando que cualquier persona se acerque lo suficiente para llevar a cabo la misión.
Para evitar que continuara su expansión, se sacrificó a los Carpinteros y a las Doncellas por los alrededores de la casa. La primera doncella en ser sacrificada fue Amane Kuze en el fondo del abismo cerca de la cámara del trono, el rift comenzó a expandirse gradualmente lo que dio tiempo de sacrificar a los carpinteros en secreto, ellos fueron sacrificados y enterrados en las paredes del santuario central, finalmente el santuario fue sellado dentro de un sueño de modo de que si la sacerdotisa despierta ella quedaría atrapada dentro del sueño para toda la eternidad y el rift ya no podría propagarse mas.
Gracias al deseo de Reika, las personas que soñaban con sus seres queridos perdidos eran invitados a la Mansión del Sueño. Estas personas sucumbían a la Maldición del Tatuaje, pero se volvían especialmente vulnerables si visitaban el santuario Kuze real o si otra víctima de la maldición soñaba con ellos.
Cuando Rei logra enviar a Reika por la barca hacia el otro mundo, el rift fue contenido y la maldición se detuvo.
Curiosidades[]
- Rift en la lengua de las zonas Mutsu, significa "sueños".